Добавить в цитаты Настройки чтения

Страница 73 из 86

Lynch pareció un poco sorprendido; y después le palmeó el hombro y llamó a un ayudante.

Como un niño, pensó. Quince minutos, un pastel y una taza de café, tiempo para recuperar el control en una habitación cercana. Se encontraba mejor, fue capaz de volver a la sala de audiencias y dejar que el secretario Lynch le presentara a Mikhail Corain, a Simón Jacques y a Nasir Harad, uno detrás del otro, caras que reconocía en lo que todavía era un poco de confusión mental, pero ahora estaba menos tembloroso: Dios, sí que sentía contradicción.

Toda la vida había tenido pesadillas sobre la publicidad, se había sentido al borde del pánico, todavía tenía destellos sobre Seguridad, la celda, las audiencias del Concejo...

La voz de Giraud diciéndole cosas que no recordaba, pero que lo amenazaban profundamente.

¡Despiértate, mierda! Se te ha acabado el tiempo para pensar. ¡Ya!

—Doctor Warrick —saludó Corain, estrechándole la mano—. Estoy encantado de conocerlo, finalmente.

—Gracias, ser.

¿Cuándo llegó el mensaje de mi padre?Eso era lo que quería preguntar.

Pero no lo hizo, Justin no era tonto. Controlar los procedimientos,había dicho Lynch, es decir, que los cancilleres no estaban ahí para hacer preguntas.

—Si necesita algo —dijo Corain—, si cree que necesita protección, espero que entienda que puede pedirla.

—No, ser, no es necesario. Pero aprecio su amabilidad.

Éste es el hombre que quiere usar a Jordan. Y a mí. ¿De qué le sirvo?¿Dónde me dejaría su protección?

Fuera de Reseune. Ya Grant dentro.

Corain le palmeó el brazo. Simón Jacques le tendió la mano y se presentó; un hombre de tipo neutro, de cabellos negros, con una mano firme y la tendencia de no mirar a los ojos.

—Canciller, presidente Harad —mientras estrechaba la delgada mano de Harad y descubría una mirada terriblemente fría y hostil. Uno de los amigos de Reseune.

—Doctor Warrick —dijo Harad—. Espero que pueda aclarar parte de toda esta confusión. Gracias por aceptar esta audiencia.

—Sí, ser —dijo él.

Aceptar la audiencia. ¿Quién me invitó?¿Quién aceptó en mi nombre?¿ Cuántas cosas se dijeron en mi nombre y en el de Jordan?

Doctor Warrick —intervino Lynch, tomándole el brazo—, si le parece bien, empezaremos.

Él se sentó a su mesa, contestó preguntas: No, no tengo forma de saber nada más que lo que dijo mi padre. Nunca discutió esto conmigo excepto antes de la primera audiencia. Cuando se iba. No. No estoy bajo drogas, no estoy bajo coacción. Estoy confundido y preocupado. Creo que es una reacción normal, dadas las circunstancias. La mano le tembló cuando levantó el vaso de agua. Bebió un poco y esperó mientras los miembros del comité comentaban, hablando en voz baja para que él no entendiera lo que decían pero pudiera oírlos hablar.

—¿Por qué cree usted en la confesión de su padre? —preguntó el doctor Wells de repente—, ¿o por qué creyó en ella en el pasado?





—La creí. Él lo dijo. Y porque... (Saca a relucir parte del asunto sexual,le había dicho Ari en el avión. Es bueno en la prensa. El escándalo siempre distrae y puedes trabajar a la gente mucho más fácilmente si todos ponen la mente en el sexo: todo el mundo tiene algo que decir al respecto. Pero no menciones la cinta y yo no sacaré a relucir las drogas, ¿de acuerdo?)Porque había un motivo en el que podía creer, en el que todos creían en Reseune. Yo mismo. Ariane Emory me chantajeó hasta que consiguió una relación conmigo. Mi padre lo averiguó.

No se sorprendieron. El interrogador asintió lentamente.

—Lo chantajeó, ¿cómo?

Justin dirigió una mirada a Mikhail Corain, aunque la pregunta procedía de un miembro del comité. Mientras vigilaba de reojo las reacciones de Corain, respondió:

—Había un trato secreto para que Jordan fuera trasladado a LÍNEAS ESPACIALES RESEUNE. Ari descubrió que Jordan había movido hilos para pasar por encima de ella e hizo un trato conmigo, un trato para que no impidiera el traslado de mi padre. —A Corain no le gustaba esa línea de preguntas... Bien,pensó él, y volvió a mirar al interrogador—. Me dijo... quería que me quedara en Reseune; quería enseñarme, veía un potencial en mi trabajo. Deseaba que ese potencial se desarrollara y quería una garantía de que Jordan no enredaría las cosas con el proyecto de psicogénesis. Lo planteó como si sólo se tratara de unos años. Dijo que después aprobaría mi pase para irme con él. Probablemente lo hubiera hecho, por norma general cumplía sus promesas.

Lenta, lentamente, empezaron a consultarse. Lo sabían,pensó él. Lo sabían, todo el comité, mierda, hasta Corain. Todos estos años; Dios mío, todo el Concejo y el Departamento, no había secretos con respecto a mi asunto con Ari. Pero les he dicho algo que ignoraban.

¡Dios! ¿En qué me he metido? ¿Qué tratos hizo Giraud?, ¿en qué me estoy metiendo ahora?

Usted quería mantener esa relación sexual en secreto —dijo Wells—. ¿Cuánto tiempo duró?

—Unas pocas veces.

—¿Dónde?

—En su oficina. En su apartamento.

—¿Quién la inició?

:—Ella. —Él sintió que se ruborizaba y apoyó los brazos en la mesa para sostenerse—. ¿Puedo añadir algo, ser? En realidad pienso, ser, que el sexo fue solamente un medio para conseguir un objetivo, para hacerme sentir lo bastante culpable para meter una cuña entre mi padre y yo. No fue solamente la relación sexual. Fue la relación entre ella y mi padre. Soy un R, ser. Y ella no era amiga de mi padre. Pensé que yo podría sobrellevar la culpa. Pensé que no iba a sentirme incómodo. En realidad, lo consideré algo muy distinto de lo que era; y Ari era maestra en manipulación, controlaba totalmente lo que hacía y yo era un estudiante que quiso hacer más de lo que estaba a su alcance. Mi padre habría entendido esta parte aunque yo no pude hacerlo en esa época. No quería que él lo descubriera. Pero lo averiguó.

Una idea apareció como un destello de certeza en medio de la contradicción en su interior: Él no pudo haberlo hecho. No puede matar a nadie. Habría estado preocupado por mí. Habría querido remediar la situación, sacarme del lío antes de actuar, y no puedo decirles eso.

Y un instante después se convirtió en: Cualquiera puede hacer lo quesea bajo una presión suficiente. Si ésa fue la presión necesaria para él, la gota que colma el vaso.

—¿Su padre le dijo que había descubierto el asunto? —le preguntó Lynch.

—No. Fue directo a ver a Ariane Emory. Yo tenía una cita con la doctora esa misma noche, más tarde. No supe que estaba muerta hasta que me lo comunicaron, después del arresto.

Entonces... entonces ese algo que había estado intentando colocar en el lugar correspondiente encajó en su sitio, y él supo exactamente dónde estaba la salida: Desautorizar lo que dijo Jordan... ser el hijo ofendido que defiende a su padre: ponerme en una posición tal que los dos lados me cortejen. Esta es la respuesta.

Y todo lo que le había dicho Ari en el avión: éste era exactamente el sitio al que había tratado de conducirlo. Sus pistas, entregadas una a una: Mierda, es toda una operadora. Pero había una forma que le permitiría dar un paso hacia cualquiera de las dos orillas, jugar con el ángulo emocional, la rabia, oponerse a Jordan y ser conquistado; o ganarse a Jordan, cualquiera de las dos alternativas, la que funcionara, y a la mierda con Corain, a la mierda con todos los que querían ser sus futuros titiriteros en ese lío. Podía maniobrar si lograba colocarse en una posición determinada y captar la atención de todos hacia sí mismo para que todos quisieran persuadirlo. Eso le permitiría recoger información, le concedería tener un poco de control, pensó Justin, y posiblemente excedía un poquito la actuación que Ari había pensado para él, pero solamente lo suficiente para preocuparla y hacer que siguiera trabajando con él y con su situación, no tanto para que se planteara una disyuntiva entre oposición y cooperación.