Страница 53 из 53
EPÍLOGO
Don Juan caminó despacio en torno mío. Parecía deliberar si decirme algo o no. Dos veces se detuvo y pareció cambiar de idea.
– El que regreses o no carece por entero de importancia -dijo al fin-. De todos modos ya tienes la necesidad de vivir como guerrero. Siempre has sabido cómo hacerlo; ahora estás simplemente en la posición de tener que usar algo que antes desechabas. Pero tuviste que luchar por este conocimiento; no te lo dieron así nomás, no te lo pasaron así nomás. Tuviste que sacártelo a golpes. Sin embargo, eres todavía un ser luminoso. Todavía vas a morir como todos los demás. Una vez te dije que no hay nada que cambiar en un huevo luminoso.
Calló un momento. Supe que me miraba, pero esquivé sus ojos.
– Nada ha cambiado realmente en ti -dijo.
FIN