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El león entró resueltamente en la parte dañada del barco. Todo es destruido y fundido. Metal fundido, plástico, un hedor terrible, lleno de cadáveres calcinados como colillas. El piso de metal todavía está muy caliente y quema las piernas desnudas, sin pelo, con la piel limpia y los dedos parejos de un niño, pero fuertes, con una hermosa hendidura de tendones de alambre, las piernas de un niño esclavo. Tienes que saltar para recoger las armas dispersas. Sí, necesitas encontrar munición. Los transmisores, dada su importancia, estaban equipados con estabilizadores especiales y tenían una capa protectora reforzada, por lo que existía la posibilidad de que equipos que eran especialmente importantes en condiciones de combate lograran sobrevivir.</p>
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Eraskandar, en un momento, estudió bien las instrucciones, por lo que fácilmente abrió la caja con botones y comenzó a escribir el código.</p>
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Entonces una voz en una mezcla de cosmolinga y el lenguaje de stalzan gorjeó una amenaza:</p>
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- ¡Levanta las extremidades, bastardo!</p>
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Un tipo con un cuerpo redondo, en un traje espacial, el mismo líder de la manada de mercenarios dirigió cuatro manos con lanzadores de rayos a Leo, y otro se aferró a la partición, la sexta mano estaba rota, colgando con un látigo flácido. El traje, al parecer, la congeló suavemente.</p>
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"¡Suelta tus armas, pequeño bastardo de Stalzan!" Ahora dé la vuelta y aléjese del transmisor.</p>
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El joven se alejó, pisando con cuidado la arena caliente, mirando de reojo a esta araña, cuyos ojos, sorprendentemente grandes y anchos, estaban ubicados a los costados. Probablemente, como un insecto, ve en imágenes de varios niveles. Esto no es un sinh, sino también una criatura repugnante, muy probablemente un "flúor". Los sinhas son mucho más delgados y respiran una atmósfera de oxígeno y helio, y en un ambiente nitrogenado mueren por daños en los cajones sin aparatos. Y estos tipos viven y entran en el metabolismo del flúor. Son solitarios y hostiles. El flúor es un elemento extremadamente raro y agresivo, por lo tanto, en la gran mayoría de los planetas, estos sujetos tienen que caminar en trajes espaciales duraderos.</p>
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La araña tecleó algo y luego chilló con estridencia y al mismo tiempo en su propio idioma.</p>
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Eraskandar decidió que sería mejor apagarlo. Arrancando un fragmento con el pie, ignorando el fuerte ardor del metal caliente, el muchacho se lo lanzó a la cabeza, y con las manos arrojó dos puñales planos de chakra, que se le pegaron a las manos empapadas de sudor (el flúor no lo hizo). notarlos). El enemigo reaccionó como un vaquero de película, pero el joven saltó rápidamente a un lado, logró evitar ser alcanzado por los rayos. El enemigo rechazó parcialmente el ataque, pero el chakra más afilado golpeó la punta del traje espacial y dañó la superficie. Los rayos de los blásteres motorizados vaporizaron el mamparo, perforando agujeros gigantes en el casco. Habiendo dado un salto mortal, Lev lanzó una pesada pieza de metal desde el suelo, recogiendo una de las pistolas de rayos al mismo tiempo. Disparando en movimiento, el joven terminador logró destruir las cinco extremidades sanas e incluso, por si acaso, una sexta pierna rota. El enemigo aún logró quemar ligeramente la piel en una tangente. Debe haber sido que el traje, cuando se dañó, en obediencia al programa de rescate, cortó las extremidades dañadas, asegurando la estanqueidad. El flúor, que salía de los agujeros, literalmente se fumaba en la atmósfera y entraba en una reacción exotérmica con el oxígeno. Hay mucho aquí, y la presión es el doble que la de la tierra.</p>
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El león gritó amenazadoramente, tratando de imitar los gritos de los oficiales de la Constelación Púrpura.</p>
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- ¡Y no pienses, artrópodo, en moverte, de lo contrario la cabeza volará en pedazos!</p>
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La araña del traje espacial tenía los ojos desorbitados.</p>
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- Acabo de llamar a mis amigos por dirfocode. No te atrevas a tocarme o te desintegrarán.</p>
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El león estaba un poco desconcertado. La idea parece acertada, pero es dudoso que haya logrado transmitir en un mensaje tan corto las coordenadas exactas del sector y el planeta, e incluso si alcanzó la cola del veloz cometa-tiempo, luego de tal una batalla es poco probable que sus cómplices quieran buscar este planeta.</p>
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"¿Sabes dónde estamos?" – Leo movió amenazadoramente las cejas, y jugueteó con el puntiagudo bíceps de su mano derecha.</p>
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“Ellos saben, rastrearán y encontrarán. Y probará instrumentos experimentales de tortura contigo - La criatura flúor era viciosa.</p>
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- ¡Sí, maldita sea, te necesitan! - El joven se retorció los dedos en la sien. - ¡Lastre al fondo, al capitán no le importa!</p>
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La criatura artrópoda torció el rostro en una mueca:</p>
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- En vano, hay algo interesante para todos nosotros en esta nave estelar, y los Sinhis lo saben.</p>
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- ¿Qué tienes? - Haciendo una pregunta, Lev al mismo tiempo examinó la habitación, creyendo razonablemente que los buitres salvajes del cosmos tendrían de qué vivir.</p>
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- Stalzan estúpido, ¡todavía eres tan pequeño! - La condescendencia en el tono de "fluoric" parecía claramente falsa.</p>
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El joven automáticamente se puso de puntillas y enderezó sus ya bastante anchos y atléticos hombros. Bajo artificial pronunciado:</p>
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- ¡Soy lo suficientemente grande como para matarte! ¡Perderás tu vida! Y las extremidades son una bagatela, porque se pueden regenerar o implantar con partes del cuerpo clonadas.</p>
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El extranjero empezó a engañar:</p>
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Si me matas, no sabrás nada en absoluto. Y si te portas bien, el chico garantizará la existencia corporal.</p>